El 24 Febrero 1990 Si fue por siempre Sandro Pertini. Séptimo Presidente de la República italiana. Nació en San Giovanni de Stella, Savona en 25 Septiembre 1896. Fue el Presidente “cerca de la gente”. Se graduó en derecho y ciencias sociales. Fue enviado al partido socialista apoyó inspirado por el socialismo. Contra el fascismo. Los escuadrones fascistas devastaron varias veces en su estudio de abogado de Savona. Fue arrestado por primera vez en 1925 para la expansión de un dossier, que denunció la ilegalidad fascista contra el caso Matteotti. Fue condenado a confinamiento en Francia durante cinco años, en el que estaba tratando de formar una acción contra-fascista con Turati y Rosselli. Regresó a Italia bajo un nombre falso, Luigi Roncaglia y fue descubierto. Condenado a diez años de prisión y tres de vigilancia especial. Su madre pidió clemencia para él. Pertini escribió una carta en la que pidió que su madre no se jugó entonces una gracia habría humillado ni mortificar su fe política. En 1943 Únete a la lucha partidista, otra vez encarcela a Giuseppe Saragat (también un futuro Presidente de la República) y condenados a muerte. Sin embargo con la ayuda de los partisanos brigada Matteotti arregla para salvarse a sí mismo. Él aprobó el atentado de via Rasella contra los Nazis. Ataque que llevó al alemán conocido como venganza de la masacre en el Fosse Ardeatine. El enemigo tuvo que ser golpeado donde fue. Pertini era un pacifista de toda la vida y democrática excepto cuando se habla de fascismo. El dolor que sentía por cómo los italianos habían marcados y humillados por el fascismo engendró en él una intransigencia sin apelación. El 8 de junio 1946 Se casó con Carla V. Nunca una licencia para mover a su esposa siempre lo había acompañado a bordo de un Fiat viejo 500 Rojo que luego fue donada al Museo de Turín. Fue el primer presidente que rompió con los protocolos para mostrar sincera indignación por cómo la clase política italiana era incapaz de lidiar con desastres naturales y cómo la corrupción y las mafias fueron piezas gangrenosas del estado. Estaba en la vanguardia para llevar la auténtica emoción y participación a los afectados por acontecimientos dolorosos. Sus discursos duros áspero pero honesto conquistaron los italianos. Como la sonrisa con la que acompañó a l’ Conquista del mundo en Italia 1982. Su comunicación simple y su acto espontáneo extrañamos mucho. Pertini figura humana y la moral única.
Héctor Parker
